Anteyer domingo, sobre las ocho menos cuarto, ya circulaba en dirección norte dejando atrás el auditorio Alfredo Kraus y sin saber aún el destino. Bastantes nubes en todo el trayecto. Cuando me di cuenta estaba llegando a Guía. Una señal indicaba un desvío, "Cenobio de Valerón" y por allí me metí.
Después de varias curvas por el interior del barranco, comprobé que volvía hacia atrás, justo por encima de dónde había subido 10 minutos antes. Aquí hice la primera parada y tiré unas cuantas fotos de la costa norte. La Isleta al fondo.
Después de varias curvas por el interior del barranco, comprobé que volvía hacia atrás, justo por encima de dónde había subido 10 minutos antes. Aquí hice la primera parada y tiré unas cuantas fotos de la costa norte. La Isleta al fondo.
La luz del sol se filtraba a través de las nubes.
Me picaba la curiosidad por llegar hasta ese barrio que se ve en la foto
Imposible vivir más cerca de la marea.
Y llegué al Cenobio de Valerón. No mucho que ver, aparte de esta foto sacada cinco o seis curvas más adelante.
Conducía por aquí sin saber bien a dónde iba a parar la carretera. Uno de los puentes de Silva vistos desde el interior con el barrio de antes al fondo.
De pronto apareció un tunel y al salir de él y tras un corto trayecto por una carretera en no muy buen estado, ya estaba en el otro lado del puente.
Esta es una casa que hay en una de las laderas del barranco y que siempre me había llamado la atención cada vez que subía por el Norte. Es enorme.
Salí por San Felipe con intención de llegar a la costa pero casi sin querer me vi subiendo de nuevo por los puentes en dirección Agaete. Me eché un cortado nada más llegar. El calorcito del café en el vaso me vino del quince para el frío en las manos.
La iglesia, dedicada a Nuestra Señora de la Concepción de Agaete, vista desde la plaza.
Vidrieda del frontis.
Me gustó bastante la iglesia de Agaete. Sobria y elegante como la de Valleseco. Cuando entré, la misa estaba a punto de acabar. De hecho sólo faltaba el "podeis ir en paz", pero el cura se enrrolló con otra cosa antes de finalizar la Eucaristía. Por más que lo intenté, no lograba entender ni una palabra de lo que decía, -"¿será que la misa es en alemán para la colonia germana de Agaete y no me he enterado?", pensé por un momento- pero no, el cura seguía y seguía hablando y a pesar de los altavoces que se ven en las columnas, vi frustados mis múltiples intentos por descifrar el mensaje transmitido antes de dejarnos "ir en paz". Cuando los fieles ya habían abandonado casi el recinto, me dirigí al cura para pedirle permiso para hacer fotos y hablaba español. Vía libre.
Tres naves sobre planta rectangular. Construida en 1875 si bien y según Wikipedia, las primeras noticias sobre su fundación se remontan a 1514
Tres naves sobre planta rectangular. Construida en 1875 si bien y según Wikipedia, las primeras noticias sobre su fundación se remontan a 1514
El rojo intenso del altar contrastaba con el blanco inmaculado de las paredes del templo
Reloj y torre del campanario desde el bar en el que me tomé el cortado. Después de esta foto, -como se ve, no eran ni las diez de la mañana-, las opciones eran dos. Volver a casa o hacer una "prueba" con dirección hacia La Aldea para ver qué tal la carretera.
Creo que no habían recorrido diez kilómetros cuando ya buscaba sitio para dar la vuelta. Curva tras curva desde que salí de Agaete. Ni arcén ni nada similar. Esperaba encontrar algún mirador porque las vistas son espectaculares, pero no había ninguno. Pude parar en un pequeño hueco al lado de la carretera, pero tampoco había sitio para hacer las fotos, salvo en el mismo asfalto, pegado a las vallas de protección y con un ojo en el visor y otro en los coches que venían de Agaete, que me pasaban muy cerca.
Aquí ya había dado la vuelta y volvía ya para mi casa. El ferry de Fred Olsen llegando desde Tenerife.
El puerto de Las Nieves desde el quinto pino.
Aunque en
dirección a La Aldea había tráfico, sin embargo no era muy denso, pero
la hora y pico de curvas seguidas que faltaban no invitaba mucho a continuar, sobre todo porque el regreso por el Sur estaba descartado y esto significaba hacer la misma ruta a la inversa para volver. De cualquier manera hay que ir. Es de los pocos sitios en los que no he estado con la moto aún y me temo que hay fotos a "puntapala". A lo mejor, llegando más temprano a Agaete no resulta tan pesado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario