Un
amigacho me ha enviado por correo electrónico esta viñeta que aparece publicada
en Eldiario.es, periódico digital que dirige Ignacio Escolar.
Con
independencia de la respuesta que el dibujante pone en boca de Rajoy, signo
evidente de la posición ideológica seguida en el periódico –muy respetable por
otra parte- resulta claro, una vez más, que esta gente de la PAH ha
interiorizado que son ellos los nuevos titulares de la soberanía popular en
sustitución de la expresada por los ciudadanos en las últimas elecciones
generales.
En este sentido, es reveladora la frase del
elemento que porta la pancarta “entonces para ustedes, ¿un millón y medio de firmas no sirven para
nada?” Pero vamos a ver, este tío ¿es tonto o qué? El millón y medio de
firmas sirve únicamente para cumplir uno de los requisitos exigidos por nuestro
ordenamiento jurídico a todo aquel que desea promover una iniciativa popular
que pueda llegar a debatirse en el Parlamento que es donde reside la soberanía
nacional. Esa es la finalidad de las firmas. ¡Ni otorgan derecho, ni
obligan a nada, ni confieren legitimidad alguna distinta de la de representar la
estricta voluntad individual de los firmantes!
Después,
la iniciativa será admitida a trámite o no y dependiendo de ello, aprobada o
no, pero en todo caso serán los representantes legítimos de los españoles y no
otros, los que libremente –sin coacciones ni amenazas- decidan con su voto si
la ILP inicia su camino en la Cámara Baja o si por el contrario debe ser
rechazada, con el importante añadido de que –y aquí reside el tufo estalinista de todo lo que envuelve a esta chica-
cualquiera que fuera el resultado final, será producto de la voluntad de los
españoles representados en el Congreso. Esto es lo que no admite Colau.
Si
el Parlamento tumba o modifica esta ILP de la PAH, estaríamos frente a la más
estricta normalidad democrática. Sencillamente. La mayoría absoluta de los
españoles ha entregado su confianza al partido de Rajoy hasta las próximas
elecciones y por tanto, es el pueblo español el que legítimamente respalda
todas y cada una de sus decisiones, las buenas y las malas. Este hecho, tan
cristalinamente democrático, resulta sin embargo intolerable para Ada y sus
chicos que lo que creen es que los 23 millones de votos depositados en las
urnas, no sirven para nada frente al millón y medio de firmas presentadas por
su plataforma, que cuentan, nada menos, que con “el masivo apoyo ciudadano que nos otorgan
las encuestas”.
No
quiero imaginar España en manos de elementos como estos, porque, en definitiva, recuerdan otros momentos de nuestra Historia en los que la agitación política callejera y los hostigamientos se llevaban a cabo sólo porque resultaba inadmisible aceptar que la derecha hubiera ganado limpiamente las elecciones.
Hola Filterarrow:
ResponderEliminarHe leido tus dos últimos artículos y son muy certeros en lo relativo a la metodología bolchevique que usa la izquierda antidemocrática española. Todo vale por el poder y todo vale desde el poder.
Pero comprenderás que la derecha española se está manifestando inútil para resolver el problema económico, que es complicado, pero no imposible. Su nivel es muy bajo. El paro llevó a Rajoy a la Moncloa y es el paro el que habilita estos movimientos bolcheviques antidesahucios promovidos por la izquierda. Antes necesitaban un Prestige, pero ahora lo tienen muy fácil, toda vez el panorama es bastante desolador.
¡Muchas gracias jl72! Me alegro que te gustaran.
ResponderEliminarPodría llegar a compartir esto que comentas sobre la incapacidad de la derecha para dar solución al problema económico, pero es que...me paro un momento, me pongo a pensar y me digo.....¿qué otra alternativa real de Gobierno tiene ahora mismo nuestro país? En el PSOE las vías de agua son peores que las del Titanic, crece una IU cuyos principales líderes no dudan en ponerse públicamente del lado de los que quieren arrasar el Congreso y de los que promueven los escraches. Al final, queda UPYD como único partido nacional.
En mi opinión es o el PP o un Gobierno formado por partidos de izquierda unidos sólo por el sentido que dices de todo vale por el poder y todo vale desde el poder.
Saludos
"No quiero imaginar España en manos de elementos como estos".
ResponderEliminar¡En manos de Zapatero y de Rajoy nos va de puta madre!, ¿NO? y eso que el Gobierno actual esta conformado por “los primeros de la clase” aunque de dudosa procedencia (¿de donde viene el Ministro De Guindos?, ¿de donde viene el Ministro de Defensa?, parece que la independencia y objetividad está en cuestión.
Bueno Anónimo, allá vamos.
ResponderEliminarTras estar en manos ZP el resultado es que tardaremos décadas en recuperarnos del daño que ZP ha inflingido a España. Respecto de la unidad territorial del país, alentó los separatismos. Desde el punto de vista de nuestro peso y de la defensa de nuestros intereses en el contexto internacional, dilapidó groseramente la magnífica herencia que recibió del gobierno anterior, para terminar humillándonos ante el mundo, al abandonar y tracionar a nuestros aliados. Luego está la economía. Arcas llenas cuando llegó y, no sólo vacías cuando se fue, sino encima endeudados hasta las fosas nasales.
Rajoy está lidiando con un país hundido y en quiebra. Este es el inmenso desastre dejado por ZP. Basta recordar, como ejemplo que permite calibrar el inconmensurable daño causado, su lúcida frase en la campaña electoral de 2008: "Esta legislatura será la del pleno empleo". No la acabó, pero eso sí, nos dejó 5'5 millones de parados. ¡Cómo pa' fiarse de este pibe!
Respecto de las procedencias del ministro De Guindos o del ministro de Defensa, de su independencia y objetividad, me temo que también discrepamos. La escasa preparación académica de los dirigentes de la izquierda española es casi generalizada. Los pesos pesados, los profesionales preparadísimos del PSOE, fueron dándose el piro ante las locuras de ZP. Ahora, los peces gordos de la izquierda son todos empleados del partido. En cambio, en el gobierno del PP casi todos son reconocidos profesionales en sus respectivos campos o altos funcionarios de la Administración del Estado y cuando dejen sus labores de gobierno, no tendrán ningún problema en ganarse cómodamente sus garbanzos con sus trabajos.
Prefiero a un presidente de gobierno con el curriculum y experiencia de Rajoy o de De Guindos antes que con el de ZP sin lugar a dudas. No hace falta decir que con el de Elena Valenciano, que se reduce a "estudios de" o con el de Cayo Lara, de profesión agricultor y con nivel de estudios de certificado de escolaridad, iremos proa al marisco ineludible y definitivamente.